La bancada DC valoró la incorporación de un criterio escalonado que permite congelar los sueldos de las autoridades, mientras que desde RN piden un reajuste mayor
Como una decisión importante, “que contribuye a disminuir brechas de desigualdad” calificaron hoy los diputados DC la incorporación, en el proyecto de reajuste, “de un criterio distinto, que por primera vez se aplica, y que recoge lo que propusimos a través de un proyecto respaldado por la Cámara; que quienes ganan menos, reciban un mayor reajuste y que quienes ganan más, reciban menos, congelándose los sueldos de las altas autoridades “.
Así lo manifestaron el jefe y subjefe de la bancada DC, Ricardo Rincón e Iván Flores respectivamente, junto a los diputados DC Juan Morano, Pablo Lorenzini y José Miguel Ortiz.
Al respecto, el diputado Rincón señaló que “por primera vez estamos ante un reajuste que considera aumentos distintos, beneficiando con un 7% a los sueldos más bajos, con un 4% a los sueldos medios y deja congeladas las altas remuneraciones del sector público “.
Sobre el guarismo propuesto, el diputado Lorenzini agregó que “si bien se ha avanzado, aún hay espacio, creemos, para mejorar un poco. Después de conocer la cifra de un 4 %, esperamos que en las próximas horas el Gobierno haga un esfuerzo. Al menos nuestra bancada y muchos otros diputados no vamos a votar, lo mínimo es reconocer la inflación para que los trabajadores no pierdan su poder adquisitivo. Tengo un estudio de los últimos 15 años, salvo el 2009, que fue un año muy malo, y siempre se ha otorgado algo más que la inflación, que es reconocer, poner al día lo que se perdió para el sueldo del próximo año.”
El diputado Morano, en tanto, precisó que “nosotros hemos planteado una fórmula que era escalonada, subir más los grados menores y disminuir o dejar en cero los reajustes de los primeros 3 grados, y el Ejecutivo parcialmente acoge aquello; dejó congelado el primer grado, y sube hasta un 7% el último. Nosotros creemos que se puede ser más audaz, ir un poco más allá, congelar los tres primeros grados y subir los tres últimos a un nivel de entre el 11% y el 7% escalonadamente".
El diputado Ortiz explicó, además, que “con esta propuesta, que incorpora varios beneficios en bonos y asignaciones extraordinarias, por lo menos 250 cargos públicos que más ganan en este país no van a recibir reajuste, eso es del orden de mil millones de pesos. Esta tarde lo veremos en la comisión de Hacienda y sabremos si hay algún cambio en el guarismo “.
Cifra insuficiente
En tanto, para el diputado Alejandro Santana (RN), integrante de la Comisión de Hacienda y jefe de bancada, "nuevamente cosechan lo que sembraron, malas políticas públicas, pocos ingresos tributarios y en consecuencia hoy lo van a pagar los funcionarios públicos".
El legislador indicó que la señal es clara. "La propuesta del gobierno la vamos a votar en contra y esperamos que de aquí a mañana cuando se debata en Sala podamos tener algo que vaya en la línea de lo que significa un reajuste real y no un reajuste nominativo, dada la inflación que hemos vivido durante los últimos 12 meses".
Por su parte, el diputado Bernardo Berger (RN), calificó de mezquina la última propuesta del Ejecutivo. El parlamentario explicó que el escenario es complejo, debido a que actualmente enfrentaremos una inflación de alrededor de 5% y que el Banco Central ya indica que para el 2016 el IPC anual estará sobre el 4%, y a ello se le debe sumar el crecimiento de la actividad el cual estará en torno a apenas el 2%. Con esto, se debería considerar un reajuste de, a lo menos, un 5%, y que incluso con esta cifra se “quedó corto”.
Berger agregó que “este es un reajuste mezquino, muy por debajo del IPC y del aumento del costo que tendrá la vida el próximo año... Yo espero que el gobierno entienda que no puede trabajar sin los funcionarios públicos, y regatear a estas altura solo genera conflicto inoficiosos”.
“No me parece para nada justo hacer responsables a los funcionarios públicos que atienden día a día a la población chilena, por la pésima gestión económica que ha desempeñado el Gobierno. Seguir manteniendo a los funcionarios públicos descontentos y en una situación de merma respecto al resto de la fuerza laboral redunda en tener a la gran mayoría de los chilenos sin atención en los servicios públicos de primera necesidad. Por eso Insisto y exijo un reajuste de a lo menos un 5% para este 2016”, enfatizó el legislador.
CÁMARA DEDIPUTADAS Y DIPUTADOS