
La comisión investigadora sobre la reconstrucción por el megaincendio de febrero de 2024 continúa recibiendo exposiciones para la elaboración de su informe.
En la sesión participó la Superintendenta de Electricidad y Combustible, Marta Cabeza. La personera detalló las acciones implementadas en materia de electricidad y gas para recuperar el suministro a las familias afectadas por el megaincendio.
Al respecto, señaló que el incendio afectó la infraestructura de redes de distribución eléctrica en media y baja tensión. Por ello, las empresas concesionarias, Chilquinta Distribución y CGE, debieron reponer en su totalidad la infraestructura para entregar un servicio continuo.
“Debido a un arduo trabajo y en un plazo menor al inicialmente pronosticado por las empresas eléctricas, para la restitución de su infraestructura dañada por el incendio, con fecha 14 de febrero de 2024, tanto Chilquinta como CGE, informaron haber finalizado la etapa de reconstrucción de redes de distribución eléctrica de media y baja tensión en todas las zonas afectadas por el incendio”, informó la superintendenta.
Para ello, además, se había aprobado un procedimiento de excepción que estableció las especificaciones técnicas mínimas para las instalaciones eléctricas de consumo en viviendas de emergencia y las viviendas existentes afectadas. Estas instalaciones eléctricas tendrían carácter provisorio para permitir la construcción posterior de instalaciones definitivas. (Ver mayores detalles presentación)
Cabeza explicó que se impartieron instrucciones a las empresas distribuidoras y se definieron mecanismos de entrega de información para dar seguimiento al avance de las instalaciones declaradas.
Chilquinta y megaincendio

El gerente general de Chilquinta, Cristian Martínez, por su parte, se refirió a los trabajos realizados tras el megaincendio. Específicamente, los sectores de Miraflores, El Olivar, Villa Independencia, entre otros puntos.
En primer lugar, indicó que se procedió de forma inmediata a reponer las redes afectadas. En el caso de media tensión, correspondían a 3,4 km y en baja tensión a cerca de 29 km de red. Todo esto con una afectación de unos 4 mil clientes.
Señaló que en algunos sectores hubo demora en la reposición producto de la falta de acceso. Por ejemplo, indicó, al existir personas fallecidas existían labores de investigación que debían realizarse en ese momento.
El personero también explicó que, en principio, “la ley obliga a las empresas a reponer empalmes y medidores en las mismas condiciones en las que se encontraban previo al incendio”.
En este caso, como había destrucción total, se procedió a la instalación de un poste de fierro con base de hormigón y un kit de emergencia para la posterior reconstrucción.
Martínez comentó que existen sectores que hasta la fecha aún no han iniciado su reconstrucción. En aquellos casos no se instaló el kit de emergencia, principalmente en la zona de El Olivar, donde la mayoría de las viviendas corresponde a departamentos o bloques de cuatro viviendas.
Pero, aseguró que una vez que estas viviendas estén reconstruidas o se requieran empalmes para disponer energía para esa reconstrucción, se pondrán a disposición.
Deudas de clientes afectados
Sobre la atención a los clientes, Martínez también afirmó a la comisión que tras el incendio las facturas fueron suspendidas sin aplicación de intereses de manera transitoria. Sin embargo, en julio del año pasado esta facturación se reactivó con el propósito de no acumular deuda y con el propósito de la aplicación del subsidio dispuesto en la materia.
Actualmente, las viviendas afectadas están con impedimento de corte.
No obstante, dijo, algunas de ellas han incrementado su deuda, lo que es parte de la preocupación que afecta a la zona y que requiere de una solución una vez que se elimine la restricción de corte.
Urgencia en la atención
Para el diputado Andrés Longton es importante el rol de la Superintendencia de Electricidad y Combustible. Esto en el trabajo en terreno y las eventuales sanciones a propósito de “incumplimientos que hemos visto estos dos años”.
Por otro lado, se refirió a la celeridad con la que se está avanzado de parte de distintas concesionarias y remarcó que las empresas tienen la obligación de prestar el servicio como corresponde.
Enfatizó que es fundamental que las familias no sigan sufriendo inclemencias; no solo por la pérdida de sus casas, sino que por el mal tiempo que exige tener los servicios básicos disponibles.
A su vez, el diputado Tomas Lagomarsino, destacó el avance en materia de autoconstrucción de las viviendas. Se trata, agregó, de personas que “por sus propios medios y recursos han autoconstruido y que deberían recibir subsidios contra recepción definitiva. Esta recepción, explicó, depende de que sean conectados a electricidad, agua potable y alcantarillado”.
En ese sentido, el legislador planteó que se podría recomendar el avance de una “ley del mono” para las zonas siniestradas o en casos de emergencias sucesivas y procesos de reconstrucción, tener mayores asistencias técnicas”.
Puntualizó que “no puede ser que a más de un año de la emergencia ninguna vivienda damnificada haya sido conectada formalmente a la electricidad de forma definitiva”.