María José Hoffmann, Jaime Bellolio y Romilio Gutiérrez cuestionaron el rol que ha tenido el Ejecutivo y recalcaron que "los municipios y los papás están asumiendo solos los costos del mal manejo del Gobierno".
Un llamado a que el Gobierno actúe con claridad y liderazgo realizaron hoy los diputados UDI de la Comisión de Educación, María José Hoffmann, Jaime Bellolio y Romilio Gutiérrez, en el contexto de los conflictos que se están evidenciado en diversas comunas del país, luego que los profesores depusieran el paro que mantuvieron por 57 días, sin estar claro la forma en que se recuperarán las clases perdidas y cómo se efectuarán los descuentos en el pago de las subvenciones a los municipios por los días en que no hubo clases.
La diputada Hoffmann, jefa de bancada de la colectividad, reclamó que “los municipios y los papás están asumiendo solos los costos del mal manejo que tuvo el Gobierno en este conflicto", lo que calificó como "inaceptable”. Planteó que, en educación, el Ejecutivo ha demostrado mucha incapacidad y estimó necesario que hoy lidere en las respuestas que se les deben dar a los niños y a los padres para que no pierdan el año escolar.
En la misma línea, el diputado Bellolio sostuvo que fue el Gobierno "el que estiró el elástico hasta este punto" y afirmó que hoy no puede desentenderse de las consecuencias. "Tiene que hacerse cargo de dos cosas esenciales: la recuperación de clases y el pago de los subvenciones, sin hacer cargar el peso de este conflicto a los municipios”, enfatizó.
Reclamó al Ejecutivo que "se haga cargo de su incapacidad de liderazgo" y que asuma su responsabilidad y escuche la voz de los padres, a diferencia de lo ocurrido con otros temas. "Nosotros esperamos que, esta vez, sí los escuche y ponga por delante el interés de los niños y niñas”, afirmó.
Para el diputado Romilio Gutiérrez, “aquí parece que el Gobierno quisiera ser un espectador, cuando su labor debe ser la de liderar este proceso". Estimó que el Ejecutivo tiene que hacerse cargo de las consecuencias de este paro y "no pasarle la pelota a los municipios", porque los perjudicados serán, finalmente, los padres y los niños.