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Publicado 30/05/2016 9:38:56

Con una alta afluencia de visitantes abrió sus puertas el edificio histórico del Congreso Nacional

En el marco de la celebración del Día del Patrimonio Cultural, los asistentes llegaron a partir de las 9:00 horas del pasado domingo 29 de mayo, para recorrer, junto a los titulares de la Cámara de Diputados y del Senado, las salas y jardines de este monumento nacional.

En el marco de la celebración del Día del Patrimonio Cultural, los asistentes llegaron a partir de las 9:00 horas del pasado domingo 29 de mayo, para recorrer, junto a los titulares de la Cámara de Diputados y del Senado, las salas y jardines de este monumento nacional.

Cumpliendo con lo que se ha convertido en una tradición, los Presidentes de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade (PS), y del Senado, Ricardo Lagos Weber (PPD), dieron la bienvenida a los cientos de visitantes que concurrieron hasta el edificio histórico del Congreso Nacional, en Santiago, para celebrar un nuevo Día del Patrimonio Cultural.

El inmueble, concebido a mediados del siglo XIX para ser la sede del Poder Legislativo, es monumento histórico desde 1976 y, cada año, abre sus puertas a las miles de personas que quieren conocer sus salones, jardines e historia.

Sobre el acto solemne, el Presidente Osvaldo Andrade indicó que esto es parte del compromiso y esfuerzo por abrir el Parlamento a la ciudadanía. “Queremos que la gente entienda que esto es parte de su cotidianeidad”, expresó.

Asimismo, el legislador agregó que se encuentran conversando sobre la posibilidad de abrir una vereda por los jardines de la sede del Congreso para que los ciudadanos puedan transitar libremente entre las calles Catedral y Compañía. “Esta es una muy buen idea, sobre todo, porque hoy nos llamó la atención la visita de mucha gente que vive en Santiago y que nunca había estado acá. Entonces, para nosotros es muy placentero saber que hay un interés por conocer un lugar con tanta historia”, remarcó.

Por su parte, el Presidente del Senado valoró la alta cantidad de ciudadanos que concurrió al lugar y apoyó la idea de abrir los espacios con historia. “Me parece que es importante que se abran los edificios públicos para que los chilenos nos formemos una opinión respecto de cómo es nuestra historia. Me llama mucho la atención el respeto con que se hace y, al mismo tiempo, el interés que hay”, resaltó Ricardo Lagos Weber.

En la ocasión, ambas autoridades del Congreso compartieron con los asistentes gran parte de la historia de cada uno de los espacios del edificio y, al medio día, procedieron a tocar las antiguas campanas pertenecientes a la Iglesia de San Miguel de la Compañía de Jesús, consumida por un incendio el 08 de diciembre de 1863 y que, en honor a las más de dos mil víctimas del siniestro, hoy se ubican en los jardines de la sede legislativa.

Historia

La construcción del edificio -monumento histórico desde el año 1976- se inició en 1854, durante el gobierno del Presidente Manuel Montt, y se concibió con el objetivo de dotar de un espacio propio al Poder Legislativo que, desde su creación el 4 de julio de 1811, no disponía de un lugar fijo para sesionar.

Los planos del lugar, que responden a un estilo neoclásico, estuvieron a cargo de los arquitectos franceces Brunet des Baines y Lucien Henault y su construcción finalizó recién en 1876, funcionando como la sede del Congreso Nacional hasta septiembre de 1973.

Tras el retorno a la democracia, en 1990, el Congreso se trasladó a la ciudad de Valparaíso, pero la sede capitalina se mantuvo para congregar parte del trabajo protocolar y legislativo, tanto de la Cámara de Diputados como del Senado. Asimismo, en él funciona parte de la Biblioteca del Congreso Nacional.