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Publicado 17/08/2015 16:30:20

Comisión de Educación aprobó en general proyecto que crea el plan de formación ciudadana

La propuesta legal, destinada a los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado, tiene como objetivo una visualización de esta materia a través de un programa explícito, desde la educación parvularia a la media. La iniciativa comenzó a ser votada en particular en la misma ocasión y se espera concluir con su despacho a más tardar este miércoles. Previa a votarse, los diputados tuvieron a la vista las opiniones del presidente del CNED, Pedro Montt, y de Loreto Fontaine.

La propuesta legal, destinada a los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado, tiene como objetivo una visualización de esta materia a través de un programa explícito, desde la educación parvularia a la media. La iniciativa comenzó a ser votada en particular en la misma ocasión y se espera concluir con su despacho a más tardar este miércoles. Previa a votarse, los diputados tuvieron a la vista las opiniones del presidente del CNED, Pedro Montt, y de Loreto Fontaine.

Por siete votos a favor, ninguno en contra y cinco abstenciones, la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados aprobó hoy la idea de legislar en torno al proyecto del Ejecutivo (boletín 10043) que crea el plan de formación ciudadana para los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado.

A favor de la iniciativa se expresaron los miembros de la Nueva Mayoría y el diputado independiente Giorgio Jackson. Se abstuvieron los cuatro representantes de la UDI y el diputado independiente Felipe Kast.

En su fundamento, los diputados UDI Jaime Bellolio y José Antonio Kast estimaron que no está claro en la redacción del texto legal el resguardo a la autonomía programática de los establecimientos, así como tampoco el pleno respeto de la institucionalidad vigente en términos de la formulación de bases curriculares.

En otra línea, los también legisladores UDI María José Hoffmann y Romilio Gutiérrez, así como el diputado Felipe Kast llamaron a considerar en la propuesta la asignación de recursos especiales para impulsar la instauración de estos planes. "Si se quiere empujar una agenda, sería muy positivo que se tengan recursos, sería lo ideal. Me preocupa dar señales de saludos a la bandera sin ponerle carne", recalcó Felipe Kast.

La diputada Yasna Provoste (DC) y el diputado y Alberto Robles (PRSD), si bien votaron a favor de la iniciativa por estimar relevante avanzar en la materia, coincidieron en que es necesario incorporar recursos que apoyen el accionar de los establecimientos educacionales en la concreción del plan de formación ciudadana y en la preparación profesional de los docentes, de modo que la idea no quede como una simple declaración de voluntad.

Para el diputado Mario Venegas (DC), el proyecto va en la línea correcta y llamó al Ejecutivo a tomar las consideraciones que se requieran para que se pueda partir, tal como lo estipula el proyecto, el próximo año.

El diputado Giorgio Jackson relevó la posibilidad de definir, desde el Congreso Nacional, los límites de la autonomía escolar, particularmente cuando hay recursos públicos de por medio, para determinar exigencias en el ámbito estudiantil, en este caso, en torno a la formación ciudadana.

Finalmente, la presidenta de la Comisión, diputada Camila Vallejo (PC), se mostró sorprendida por la abstención del sector opositor y, en particular, por argumentos vertidos por algunos de sus representantes en orden a que el proyecto pone en riesgo la institucionalidad y que se puede prestar para que un Gobierno promueva una visión ideológica de la educación cívica. Recalcó que, lejos de ese planteamiento, lo que se persigue acá es generar una cultura que rechace los adoctrinamientos y fomente el respeto de los derechos individuales, la democracia y las instituciones.

Exposiciones

En la sesión, previo a la votación, fueron escuchadas las opiniones del presidente del Consejo Nacional de Educación (CNED), Pedro Montt, y de la exjefa de la Unidad de Currículum y Evaluación del Gobierno de Sebastián Piñera, Loreto Fontaine.

Pedro Montt explicó antecedentes sobre el funcionamiento del CNED y, en particular, respecto del proceso de aprobación de las bases curriculares que propone el Ministerio de Educación, los plazos involucrados y las implicancias. En este ámbito sostuvo que los tiempos definidos, tanto para el análisis de las bases nuevas (60 días) como de aquellas que fueron observadas por el CNED (45 días), son insuficientes considerando la complejidad de los temas.

Montt criticó que los cambios curriculares se han ido desarrollando dependiendo de muchas variables, pero no sobre la base de un criterio institucional preestablecido y estudiado; y apeló a generar sistemas curriculares cuya revisión sea cada diez o doce años, de modo de dar estabilidad en el tiempo.

En el ámbito de la educación ciudadana, informó que en el área de ciencias sociales, historia y geografía existe un eje curricular que se incluye este tema, desde primero básico hasta cuarto medio. Reconoció que la perspectiva de transversalidad de esta malla curricular es discutida y que existen voces en torno a la necesidad de reinstaurar la asignatura obligatoria de educación cívica en los últimos dos años de la enseñanza media. En todo caso, dijo que, a nivel internacional, no existe una norma específica, pero sostuvo que la tendencia general pone el foco en el desarrollo de las actitudes cívicas, más que en la instauración de asignaturas particulares.

Dijo que estudios internacionales muestran que Chile presenta mejores resultados en el ámbito de la formación ciudadana respecto del resto de los países de América Latina, posicionándose cerca del promedio internacional, aunque bajo este. Sin embargo, dijo que a nivel curricular, nuestro país presenta importantes vacíos, por ejemplo, en lo relativo al tratamiento de temas como la cohesión social; los derechos y obligaciones de la participación ciudadana (voto); el gobierno y las instituciones públicas; la Constitución; y los riesgos a la democracia (autoritarismo, populismo, etc.).

Loreto Fontaine resaltó que el proyecto no busca modificar el currículum, pero consideró que corre el riesgo de aparecer como reiterativo; establecer precedentes que pueden ser dañinos para la estabilidad del sistema curricular; y despertar rechazo y confusión en los colegios, que ya están ahogados por una cantidad inmensa de regulaciones de exigencia.

Detalló que, dentro de los aspectos más discutibles, está el hecho que los objetivos educacionales que se proponen en el proyecto, tanto en su contenido como en su forma, son muy similares a los objetivos generales que establece la Ley General de Educación para la enseñanza básica y media.

Respecto del segundo punto observado, resaltó que, al proponer cambios por la vía legal, distinto al sistema de formación curricular general, crea un precedente desafortunado y alejado de los mecanismos de contrapeso y de control de expertos que proporciona el trabajo conjunto entre el Ministerio de Educación y el CNED. "Esto puede abrir la puerta para que se utilicen en el futuro mayorías para incluir otros objetivos, contenidos y acciones adicionales en la educación escolar con el riesgo de politizar, recargar o desestabilizar el currículo", afirmó.

En cuanto a su tercera observación, dijo apuntar a la escasez del tiempo escolar. Planteó en este punto la posibilidad de que se interfiera con la autonomía de los establecimientos.

Planteó que, si se desea dar relevancia a la formación ciudadana, lo más conveniente sería que el Ejecutivo complete los procesos que están inconclusos en el área curricular para la educación media que se venían desarrollando en la administración anterior y que fueron interrumpidos en el actual Gobierno. Señaló que, por ejemplo en tercero y cuarto medio se podrían tratar temas como los denotados por Pedro Montt y que representan un vacío en la educación cívica chilena (voto, peligros para la democracia, etc.).

Cabe destacar que la Comisión inició en la jornada de hoy la votación en particular del proyecto, esperándose concluirla en esta semana, el martes o, a más tardar, el miércoles.