La iniciativa, despachada por la Comisión de Desarrollo Social, incluye en la definición de persona con discapacidad a las que tienen una o más deficiencias del neurodesarrollo, donde se entenderán incluidas todas aquellas que comprenden la condición del espectro autista.
La moción que reemplaza el artículo 5º de la Ley de igualdad de oportunidades y de inclusión social de personas con discapacidad, surgió con el fin de que niños, jóvenes y adultos con distintos tipos de trastorno autista, no sean discriminados y puedan acceder a beneficios sociales (boletín 11240).
La diputada Marcela Hernando (PRSD), autora de la moción, explicó que la idea surgió luego de la aprobación de la Ley de Inclusión Laboral, que promueve la contratación del 2% de personas con discapacidad en las empresas. Lo que requiere que primero estén inscritas en el Registro Nacional de la Discapacidad, datos que son informados a la Dirección del Trabajo.
“El problema es que existe una cantidad importante de personas con trastornos del espectro autista que no tienen credencial ni les interesa tenerla, porque es discriminatoria, entonces, el trastorno, aunque sea muy leve, y las personas sean profesionales y tengan un desarrollo bastante significativo, aparecen clasificados o catalogados como discapacidades mentales severas y eso no les abre las puertas ni en el sistema escolar ni en ninguna parte”, indicó.
Al mismo tiempo, la parlamentaria recalcó que esto también tiene que ver con una serie de accesos a diferentes ayudas técnicas, servicios de salud, etc. “Esperamos que cada vez sean mayores las ayudas que se les den, porque es una condición bastante cara de mantener para una familia común y corriente”, expresó.
El Director del Servicio Nacional de la Discapacidad, Senadis, Daniel Concha, valoró la iniciativa que permite visibilizar la situación de personas con condición del espectro autista.
“Hay muchas barreras actitudinales, hay muchos estereotipos, y la verdad es que, a medida que se avanza en los diagnósticos y en la especialización, sabemos que la estimulación temprana, las adecuaciones y los ajustes, hacen que las personas que tengan la condición de espectro autista puedan desarrollarse y ser parte de la sociedad. Evidentemente, esto ayuda a visibilizar y hacernos conscientes de que son personas que con ajustes y los apoyos adecuados son parte de la sociedad”, admitió.
El director del organismo explicó, además, que pese a que en Chile hay cerca de 2 millones 800 mil personas con discapacidad, las que cuentan con credencial son muy pocas.
Agregó que la inscripción es voluntaria y permite acceder a diversos beneficios sociales. “En esto no debe existir temor, porque los datos son reservados y manejados sólo por especialistas”, reiteró.
El Trastorno del Espectro Autista se define como la dificultad persistente en el desarrollo del proceso de socialización (interacción social y comunicación social), junto con un patrón restringido de conductas e intereses, dentro de lo cual se incluyen restricciones sensoriales.
Según la Sociedad de Siquiatría y Neurología de la Infancia y la Adolescencia, el autismo es una constelación de síntomas debido a una disfunción del sistema nervioso central con grados variables de intensidad, que se traduce en un trastorno profundo de la conducta con síntomas centrales que lo definen. Es una disarmonía generalizada en el desarrollo de las funciones cognitivas superiores independiente del potencial intelectual inicial.
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