Agrupaciones de taxistas cuestionaron que se quiera regular en forma especial a las aplicaciones móviles, cuando ya existen leyes para el transporte remunerado de pasajeros. Mientras, Cabify y Uber apoyaron la idea de avanzar en la materia, aunque plantearon algunos reparos al texto propuesto.
Con la presencia de la ministra de Transportes, Gloria Hutt, y del subsecretario del ramo, José Luis Domínguez, diversas agrupaciones de taxistas , Cabify y Uber expusieron ante la Comisión del ramo durante esta semana para precisar sus posturas respecto al proyecto que regula las aplicaciones de transporte remunerado de pasajeros y los servicios que prestan (boletín 11.934).
La Confederación Nacional de Taxis de Chile (Confenatach) planteó que la regulación no es necesaria puesto que ya existen leyes y decretos que norman la actividad, a la cual debieran someterse los nuevos conductores.
El secretario general de la Confederación, Alonso Puebla, dijo que los taxistas se sienten vapuleados porque nunca se puso freno a la situación ilegal de las aplicaciones. Además, el dirigente criticó el actuar del Ministerio de Transportes, por no haber sancionado a los taxistas que tenían malas prácticas, lo que ha afectado también al gremio.
“El Ministerio tenía la suficiente fuerza para aplicar los castigos a los taxistas que en este momento tenemos como malos elementos, pero nunca lo quisieron hacer. ¿Por qué? No tengo idea. En varias respuestas que me dio el Ejecutivo señalaron: no podemos dejar cesante a la gente, pero nos perjudicaron a nosotros. Ahora, no es malo que regulen las plataformas, pero las aplicaciones que ingresen a esas plataformas tendrían que cancelar impuestos y todo lo demás”, señaló.
Por su parte, la Coordinadora de Taxis Independientes (Conataxi) rechazó que el proyecto considere a las plataformas como economías colaborativas, cuando operan con precariedad laboral y evasión tributaria, que en el caso de Uber llegaría a 50 millones de dólares solo en 2017.
El coordinador general de Conataxi, Claudio Morales, insistió en que se estaba frente a un modelo de negocio basado en violar la ley y rechazó que se vea a los taxistas como un monopolio, cuando la competencia se da entre ellos mismos.
En la sesión también expuso la pyme de aplicación tecnológica Holataxi, a la que se unen a diario una treintena de taxistas. Su representante, Juan Carlos Castro, rechazó que las actuales aplicaciones operen ilegalmente, ya que Uber y Cabify se reconocen como empresas de transporte pero no son reguladas como tales.
Cabify y Uber
El gerente general de la aplicación Cabify, Agustín Guilisasti, informó que la empresa española tiene 35 mil socios en Chile y 2.500 empresas que utilizan sus servicios, alcanzando a dos millones de usuarios.
Estimó que se debe avanzar rápido en la tramitación del proyecto de ley, para evitar la violencia e inseguridad en las calles. “Por eso hemos venido, a mostrar números, a explicar cómo funciona nuestro modelo de negocio, que es muy distinto al de otras aplicaciones", sentenció.
Sostuvo que ellos pagan impuestos, tanto los socios como la empresa. "Creemos que eso es muy importante y que nivela la cancha con los mismos taxistas. Entonces, acá las partes tienen que ceder, con foco en el usuario y en seguridad, que es lo primordial. Acá, automáticamente, el parque se va a limitar, porque van a aumentar las exigencias de seguridad y eso va a hacer que mucha gente que no cumple no va a poder transportar pasajeros”, remarcó.
Nicolás Sánchez, representante de Uber, empresa con dos millones de usuarios activos y 80 mil conductores en 25 ciudades del país, estimó que el proyecto en trámite presenta avances como son la obligación de contratar seguros; incorporar a los taxis a la tecnología; y fomentar la protección de los usuarios.
Sin embargo, dijo que requieren de revisión el hecho de considerar las plataformas como "empresas de transportes"; exigir a los conductores licencia profesional A-1 (sería a su juicio imposible de cumplir en todo Chile); presentar inhabilidades para los conductores; la propuesta de entrada en vigencia de la ley (piden ampliar de los 90 días a 12 meses); y la fijación de condiciones de operación por la vía administrativa.
Reacciones parlamentarias
Los diputados René Manuel García (RN) y Loreto Carvajal (PPD) reconocieron la importancia que tienen en la actualidad las aplicaciones de transporte. Sin embargo, coincidieron en la necesidad de regular esta actividad, para que todos puedan trabajar en igualdad de condiciones.
"Lo que nosotros creemos y vamos a hacer, por lo menos hasta el minuto en lo hay consenso en la Comisión, es que todos puedan trabajar en igualdad de condiciones. Porque estamos pensando que, entre más competencia hay, es mucho mejor para el usuario y ese es el fondo del problema", planteó García.
Estimó que "no se trata de que uno defienda a alguien, que uno defienda al otro, sino que es importantísimo para todos los usuarios tener lo más luego posible a todas estas empresas regularizadas y que trabajen en forma legal”.
La diputada Carvajal recordó que han habido hechos como el del carabinero que tuvo que dispararle a un chofer; como la muerte de un conductor, que son hechos bien catastróficos que, en definitiva, promueven a que, como Estado, se genere una plataforma única de carácter estatal que genere las condiciones de fiscalización y regulación necesaria, pero que garantice el trabajo histórico que han tenido los colectiveros y los taxistas.
" Solo Cabify nos mencionaba 35 mil vehículos que no están suscritos a la normativa del decreto 80 por el cual ellos nacieron, es decir, vehículos que de la mano del Ministerio, no se dice nada de ellos”, evaluó.
En la actualidad, se estima que existen 90 mil conductores inscritos en plataformas de transporte, de los cuales cerca de diez mil estarían activos, cinco mil en la región Metropolitana y cinco mil en regiones.
CÁMARA DEDIPUTADAS Y DIPUTADOS