La iniciativa del Ejecutivo plantea aprovechar las potenciales ventajas de la migración internacional en beneficio del país y regular la obtención de visas y permisos de residencias.
El Subsecretario Rodrigo Ubilla explicó a la Comisión de Gobierno Interior que la regulación vigente data de 1975, y que es necesario reformularla en el contexto actual de procesos migratorios que se dan en el país.
Actualmente en Chile existen 340 mil extranjeros, lo que representa un 2% de la población total; y el 86% de los permisos de residencia son otorgados a ciudadanos latinoamericanos.
El texto (boletín 8970) establece tres niveles de categorías migratorias:
- Permanencia, la que a su vez tendrá tres subcategorías que serán turismo, tránsito vecinal y activo (personas que concurren al país a realizar una actividad remunerada como artistas o conferencistas), las que no permitirán postular a una residencia temporal;
- Residencia, que podrá ser temporal (estudiantes, trabajadores temporeros, familiares convenios internacionales etc.), oficial (personal diplomático y consular) y definitiva.
- Nacionalidad
Además, promueve la protección y reconocimiento de los derechos de los migrantes, consagra derechos laborales, de salud y de educación, reunificación familiar y envío de remesas; y mantiene el sistema de protección a los refugiados y las normas contra la trata de personas.
El presidente de la Comisión de Gobierno Interior, Germán Becker (RN) reconoció que este es un proyecto muy complejo y una materia “en que nuestro país está bastante al debe”. El legislador anunció que invitarán a diversas organizaciones relacionadas con el trabajo y apoyo a los migrantes, para empezar a analizar en particular el articulado.
Por su parte, el diputado Ramón Farías (PPD) coincidió que es un proyecto necesario e importante, considerando la gran cantidad de gente que está inmigrando a Chile por la buena caIidad de la economía, lo cual requiere de una legislación más moderna: Sin embargo, el parlamentario manifestó su inquietud por la propuesta de diferenciación de tipos de visas y la excesiva reglamentación que se propone.
El proyecto crea una nueva institucionalidad migratoria dependiente del Ministerio del Interior y un Consejo de Política Migratoria, conformado por los ministros del Interior, Relaciones Exteriores y Hacienda, los cuales deben suscribir la Política Nacional de Migración y Extranjería y asesorar al Presidente de la República en su formulación.
Otras materias reguladas por el presente proyecto serán las causales de expulsión, la revalidación de títulos profesionales obtenidos en el extranjero, el límite de trabajadores extranjeros que puedan ser contratados en una empresa y normas relacionadas a los chilenos en el exterior y las normas de reciprocidad.
CÁMARA DEDIPUTADAS Y DIPUTADOS