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Publicado 22/09/2015 10:30:20

Proyecto de ley propone aumentar a 15 días el plazo de retracto para contratos o compras por internet

El objetivo es dar mayor garantía a los derechos de los consumidores que adquieren bienes por internet ya que la recepción del mismo no es inmediato.

El objetivo es dar mayor garantía a los derechos de los consumidores que adquieren bienes por internet ya que la recepción del mismo no es inmediato.

El diputado de la UDI, Enrique Van Rysselberghe, junto a sus compañeros de bancada, Juan Antonio Coloma, Sergio Gahona, Gustavo Hasbún, Javier Hernández, José Antonio Kast, Joaquín Lavín, Felipe Ward y la diputada María José Hoffmann, presentó un proyecto para ampliar el plazo de retracto en los contratos celebrados por medios electrónicos.

La propuesta contenida en el boletín 10275, y remitido a la Comisión de Economía, modifica la ley 19.496, sobre Protección de los Derechos del Consumidor para ampliar de diez a quince días el plazo de retracto que tiene el consumidor que adquiere un bien a través de internet.

Los parlamentarios autores del poyecto indican que Chile está a la vanguardia en materia digital, donde se usa internet en diversas transacciones comerciales que posibilitan a los consumidores mayor bienestar.

Sin embargo, no es posible olvidar que estas acciones no están exentas de hechos fraudulentos u otras anomalías de orden legal o técnico como, por ejemplo, recibir productos con deficiencias o retrasos en la distribución.

A partir de lo anterior, la necesidad de contar con mayores niveles de seguridad en las transacciones comerciales efectuadas a través de internet, resulta ser una situación absolutamente plausible a partir de la cotidianeidad de éstas, promoviendo con ello la seguridad y credibilidad del sistema.

Los legisladores recuerdan que la venta o comercialización de bienes a través de Internet se encuentra regulada a través de la ley del consumidor y el derecho de retracto le asigna al consumidor la posibilidad de dejar sin efecto el contrato ejecutado. Pero dado que miles de consumidores no tienen una aproximación física con el bien adquirido sino días después de perfeccionada la venta o transacción comercial, resulta plausible aumentar el plazo estipulado en la actual norma.