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Avanza proyecto que fomenta la participación ciudadana para reconocer humedales urbanos

La Sala de la Cámara despachó la iniciativa que establece las formas en que se podrá iniciar el proceso de declaración de un humedal urbano. De igual manera, instituye requisitos mínimos a las solicitudes de personas naturales para este reconocimiento.

Por 137 votos a favor y 4 abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó y despachó al Senado el proyecto que agrega mecanismos de participación directa en las solicitudes de reconocimiento de la calidad de humedal urbano (boletín 14619).

La disposición señala que la solicitud deberá originarse por, al menos, dos organizaciones territoriales. Estas deberán tener presencia demostrable en la comuna donde se ubica el humedal. También, podrá ser una organización sin fines de lucro dedicada a la protección y defensa del medio ambiente.

La norma establece categorías, divididas en cantidad de personas naturales o jurídicas, directamente interesadas en la protección del humedal. Detalla que estas deberán ser representativas de la población que va hacer afectada con la declaración de este humedal. La clasificación es la siguiente:

  • Para comunas de hasta 10 mil habitantes, se solicitará un mínimo de 50 personas interesadas en firmar en pro de la protección del humedal.
  • 100, en el caso de comunas de más de 10 mil y hasta 30 mil habitantes.
  • Una tercera categoría exige 150 personas para comunas de más de 30 mil y hasta 100 mil habitantes.
  • Finalmente, 200 personas para comunas con más de 100 mil habitantes.

 

Se entenderá por persona natural directamente interesada aquella que reside en la o las comunas donde se solicita el reconocimiento de humedal urbano.

Las solicitudes de reconocimiento de humedal urbano se presentarán ante el Ministerio del Medio Ambiente. El trámite, igualmente, se podrá realizar ante la municipalidad o municipalidades en donde se encuentre ubicado el humedal.

Informó el proyecto a la Sala la diputada Camila Musante (IND).

Participaron también en el debate las y los diputados PEV Viviana Delgado y Félix González; PC Carolina Tello; UDI Marta Bravo, Daniel Lilayu, Juan Fuenzalida, Cristhian Moreira, Fernando Bórquez, Henry Leal y Gastón Von Mühlenbrock; PPD Carolina Marzán; FRVS Jaime Mulet; independientes Jaime Araya, Tomás Hirsch, María Luisa Cordero, Felipe Camaño, Francisco Pulgar y Sebastián Videla; RN Hugo Rey y Jorge Rathgeb; PS Ana María Bravo, Daniel Melo y Emilia Nuyado; DC Héctor Barría; PDG Rubén Darío Oyarzo y Roberto Arroyo; PL Alejandro Bernales y Luis Malla; PREP José Carlos Meza; y RD Jaime Sáez.

Fundamentos del proyecto

El texto precisa que, el 9 de agosto de 2021, se publicó el primer capítulo del “Sexto Informe de Evaluación del Cambio Climático”. Este fue un trabajo del “Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático”.

Se destaca que sus conclusiones son catastróficas y demuestran la necesidad de tomar medidas para hacer frente al cambio climático. En específico, indica que se debe lograr una reducción drástica de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, en un cortísimo plazo.

La iniciativa señala que, en este último tiempo, el planeta ha registrado eventos climáticos extremos. En esta línea, menciona las inundaciones en partes de Asia y Europa. También, olas de calor en América del Norte. Asimismo, la sequía que afecta a parte del hemisferio sur y, particularmente, a nuestro país. Todos estos, hechos que se espera mantendrán en el tiempo y aumentarán su severidad en el corto plazo.

Asimismo, informa que muchos de los cambios ya generados por los gases de efecto invernadero son irreversibles por siglos. En especial, los cambios en el océano, en las capas de hielo y el nivel global del mar. De igual manera, detalla que la temperatura global seguirá aumentando hasta, al menos, la mitad de siglo, bajo todos los escenarios de emisiones considerados.

En la misma línea, alerta sobre el pronto traspaso de umbral de aumento de la temperatura en el mundo, fijado en el Acuerdo de París. Este ponía como alarma un tope del incremento de la temperatura de 1.5 °C.

Finalmente, sentencia que la actividad humana está generando efectos y cambios drásticos en el clima que se mantendrán por siglos o, incluso, milenios. Por lo mismo, señala que “es menester actuar ahora”.